En este experimento usamos el conjunto de difracción del experimento anterior pero agregamos una WebCam que acumula cargas eléctricas en las celdas de su CCD.
Configuramos la WebCam para capturar unos pocos fotogramas por segundo y alargar el tiempo de exposición al máximo., esto se puede hacer, por ejemplo, utilizando nuestras aplicaciones Entrada de video, VideoInspector, MicroVideo, MicroViewer O Grabadora de vídeo. Quizás el más adecuado sea Entrada de video que también podría contar la cantidad de píxeles iluminados en las diversas áreas y estimar aproximadamente la cantidad de fotones en función del brillo.
No todas las cámaras web se pueden ajustar hasta un fotograma por segundo, algunos solo suben hasta tres y otros solo hasta cinco (abre el "Panel de formato" para ver sus límites). Pero todos irán igualmente bien porque la cantidad de fotones que se recolectan siempre es de muchos miles de millones, incluso con tiempos de exposición muy cortos..
Al final del tiempo de exposición, los electrones acumulados son contados aproximadamente por la electrónica de la cámara y transferidos a la PC con una matriz de píxeles..
En este punto, alguien "observa" el resultado., no lo "observas", o tal vez lo mires después de un mes, nada cambia. No somos lo que Quantum define como un "observador" y no hay paradojas como la del gato de Schrodinger., porque la observación ya ha tenido lugar en la cámara.
La "observación" ya ha ocurrido cada vez que los fotones golpean el chip CCD de la cámara y se convierten en electrones, aumentando la carga eléctrica en el punto de impacto. (pixel).
Cada fotón decidió por sí mismo en qué dirección ir y dónde golpear la pantalla.. Su elección no estuvo determinada por condiciones previas (variables ocultas). Otros experimentos más complejos y las desigualdades de Bell han demostrado esto una y otra vez..
Sin embargo, no se puede poner en duda que cada fotón ha elegido su propia trayectoria y también observamos que la probabilidad con la que han elegido sigue unas reglas estadísticas y que por tanto muchos de ellos se han comportado de la misma forma y han creado puntos brillantes mientras que muy pocos han elegido. la trayectoria que los llevó a una zona oscura.
Sin embargo ellos eligieron.
Cada fotón ha elegido si ir en una dirección u otra.
Por lo tanto, no es necesario presentar rarezas como la superposición de estados..
Lo que nos importa a los que vivimos en el campo macroscópico es el resultado global, es decir, la probabilidad de ocurrencia de las diversas trayectorias, y no tiene sentido preguntar cómo cada fotón decidió su trayectoria ni tampoco tiene sentido imaginar que estaba en una superposición de estados que luego colapsaron en una trayectoria específica..
Cada fotón, en absoluta libertad, sin que su elección esté "determinada" por nada más, ha elegido su trayectoria.
De ahí los sofismas como “podemos decir que eligió A o B ?Son preguntas sin sentido. El fotón hizo una elección sin ninguna duda., por lo que ciertamente podemos decir que cada uno de ellos ha elegido la trayectoria A, o la trayectoria B, o C. No importa si sabemos o no cuál es esta trayectoria, que podemos medirlo, si es una función de onda que ha colapsado o si es otra cosa. Pero no hay duda de que cada fotón es su elección., de alguna manera, el lo hizo.
EN CONSTRUCCIÓN